¿Estás convencida o convencido de criar y educar a tus hijos e hijas con apego seguro?
Muchas familias tratan de hacer una crianza consciente y una educación respetuosa con su prole. Uno de los objetivos que persiguen estas personas es crear vínculos de apego seguro porque esto es una garantía de salud mental, de éxito futuro y sobre todo de estabilidad y felicidad, que es el más valioso regalo que podemos hacerle a nuestros hijos e hijas.
Pero, ¿lo que hacemos es garantía de apego seguro? Muchas veces no. Mi experiencia en el trabajo con familias me demuestra que no siempre estamos en la línea de lo que es más adecuado. Confundimos la seguridad con la permisividad, el respeto con la ausencia de límites y la autonomía con el hecho de que las y los más pequeños tomen decisiones que no encajan para nada con sus necesidades y sus capacidades. Cualquiera que entienda mínimamente de crianza y educación, quiere generar un vínculo seguro, pero, aún así, conozco muchas familias que pretendiendo lograr la seguridad en sus relaciones están creando justo el efecto contrario.
Errores típicos que generan apegos inseguros:
Te cuento algunos errores típicos que suelen darse para que chequees si vas en la dirección correcta, te voy enlazando post en color azul para que puedas profundizar más si quieres.
1. No mostrar incondicionalidad en los momentos difíciles (discusiones, rabietas…): “Mamá no te va a permitir esto, no va a estar siempre ahí…” Con este tipo de expresiones, caemos en el chantaje emocional o en la negociación de los afectos: “como te has portado mal no te doy un beso”.
2. Comportarte con tus hijos e hijas como si fueras su colega: Ellos y ellas necesitan que tú muestres que tienes soluciones a los problemas que van surgiendo porque eso es lo que genera seguridad. Esto implica, en muchas ocasiones, marcar límites y mostrarles cuáles son las normas que rigen las situaciones en las que se encuentran. Sencillamente porque son situaciones nuevas para ellos y ellas y desconocen cómo se funciona en ellas.
3. Ponerles en la tesitura de decidir algo que sobrepasa sus capacidades y sus necesidades: Cuando les preguntamos qué quieren comer, si quieren comer, si nos vamos ya a dormir, qué hacemos en una situación difícil, etc. Yo soy partidaria de hacer partícipe a niños y niñas de este tipo de decisiones pero siempre que estén calibradas por una persona adulta: elegir entre coliflor o judías, entre melocotón o manzana, respetar sus necesidades de sueño… Pero muchas veces, se plantean preguntas en abierto sin opciones a niños y niñas muy pequeños y se pierden, se les pregunta si quieren acostarse cuando la hora en la que se hace ya no garantiza sus necesidades de sueño o se les da la opción de elegir cómo resolver un conflicto de relaciones que aún no comprenden y así, un largo etcétera.
4. Cuando tras mantener un pulso en una situación de tensión, cedemos: no te compro, no te doy, no te dejo… tras mantener un pulso de media hora cedemos. No es una cuestión de darle la razón a las y los pequeños o que se salgan con la suya, algo muy habitual en nuestra , eso puede tener sentido si la tienen. Es que si llevamos media hora dando argumentos para el no y finalmente decimos que sí, generamos inseguridad. Su mundo se vuelve inestable en un momento en que están aprendiendo cuáles son las constantes que explican los aspectos relevantes de la vida.
Estos y otros errores, son habituales en la crianza y la educación de las y los más pequeños, incluso en familias muy sensibles a las necesidades infantiles y también en profesionales de la educación. En el curso Claves para criar desde el apego seguro, te explico qué tipos de apego existen porque siempre hay apego aunque no siempre el vínculo que se genera es seguro. En las vídeo-lecciones que forman el curso, te explico con más detalle los errores que cometemos habitualmente, te doy pautas para lograrlo en tu familia y en las escuelas, analizamos cómo influyen estas relaciones tempranas en nuestra vida adulta y en las relaciones que establecemos en el trabajo, la familia y la pareja.
Un curso que puedes hacer cómodamente en vídeo-lecciones de unos veinte minutos que puedes ver mientras cocinas, puedes escuchar en el coche mientras vas al trabajo o cómodamente en tu sofá si tienes ratitos para hacerlo.
Podrás contactar conmigo, resolver dudas, completar la información con enlaces relacionados y si eres alumno/a PRO de la Escuela Bitácoras, también conseguir un título acreditativo de tu formación, ideal si trabajas en el mundo de la crianza y la educación respetuosa. Si este es tu caso, hay información precisa sobre cómo manejar las relaciones de apego con tu alumnado y sus familias, además de artículos relacionados para que puedas completar tu formación. Puedes acceder al curso desde el enlace o desde las fotos del curso.
En estos días, con las rebajas de la Escuela, puedes hacer este curso por solo 19,90 euros, este precio puede ser inferior si haces más cursos eligiendo un pack. Puedes matricularte ahora aprovechando el descuento y hacerlo en invierno o cuando tú quieras porque queda en tu plataforma de manera ilimitada en el tiempo (salvo en la opción PRO).
Si tienes dudas, puedes escribirme a lamamadepequenita@gmail.com o ponerte en contacto con la Escuela Bitácoras desde la web.
Espero que sigas disfrutando del verano.
Cuánto me alegro de que te sirviera… un abrazo fuerte.
Gracias por contestar Soraya, mil gracias. Ésta respuesta ha llegado a mi precisamente hoy, que los miedos a » si lo estoy haciendo bien» me invadían. Tu respuesta me ha dado fuerza y confianza.
Vamos por el buen camino!!
El ser consciente de las carencias que uno tiene, y el porqué..y tratar de no repetir patrones con los hijos no es nada fácil, son ejercicios de conciencia continúa, a veces agotador, pero merece la pena, vaya que sí! Nosotros vamos a comer el mundo!
Gracias mil!!!!!!!!!
Muchas gracias por transmitirme tu sensación con los cursos, es un estímulo muy importante para mí. Tengo dudas con esto de los niños y niñas de alta demanda. ¿Qué es alta demanda? ¿Cuánto influye el estado en el que estamos para decidir si es mucho o poco? Pienso que es subjetivo. Cada niño o niña demandan lo que necesitan. Cada bebé, niño o niña es único y en continua evolución, lo que sirve en un momento no sirve para otro. Respecto a tu hija, no veo nada preocupante en lo que cuentas, es muy pequeña, te adora y además sabe que tú resuelves sus problemas, satisfaces lo que ella va necesitando, demuestra que es una niña lista queriendo estar a tu lado. Simplemente te diría que juegues a darle más espacio cuando ella tome la iniciativa, es decir, si ella se lanza a hacer algo sola, facilita que así sea, muéstrale que estás ahí pero ve dándole espacio. Y cuando sientas que está a gusto con otras personas deja o disfrute alejándote cada vez un poquito más, facilita que haga cosas con otros miembros de la familia con quien ella se sienta a gusto. Poco a poco, en función de cómo sea ella, pasados los dos años, irá siendo cada vez más independiente. Pero hay mucho margen. Te dejo algo que escribí y puede darte claves. http://lamamadepequenita.com/dos-anos-de-amor-una-vida-independiente/ Un abrazo
Hola Soraya!
He visto tus dos cursos en la escuela bitácoras. GRACIAS, por como lo explicas, por hacerlo fácil, de verdad gracias, me ha sido de mucha ayuda.
Podrías decirme dónde puedo encontrar información sobre la sobre protección y los niños de alta demanda??
Después de ver el curso claves para la crianza de apego seguro, tengo dudas.
Mi pequeña tiene ahora 20 meses, siempre ha querido estar donde yo estaba, exploraba, pero si me veía. Ahora sigue siendo así, quiere que esté con ella todo el rato, para todo, participando de lo que ella hace, si me voy ( ha hacer la comida por ejemplo) deja lo que está haciendo y viene a ver qué hago y se queda allí, observando.
Cuando está en un sitio que no conoce, quiere que yo vaya con ella a explorar..
Siempre he respondido a sus necesidades ( había leído mucho sobre crianza respetuosa) la casa está preparada para su libre exploración y con todo accesible para que ella en la medida que pueda lo haga sola ( lavarse las manos, leer cuentos, trasvases..) creía que sus maneras de actuar eran por un apego seguro, pero tengo dudas sobre esas dos cosas. Puedes ayudarme?
Ya sabes que esto es un aprendizaje diario. Lo primero es ser consciente de que hay algo que queremos cambiar y luego ir probando no hay recetas, cada niño y cada niña son distintos. Muchas gracias por tus palabras y por compartir por aquí tu experiencia. Un abrazo.
Gracias por este post, hay muchas cosas que puedo mejorar, es que soy muy blandenga con mi chiquita.
Muchas veces me encuentro con la situación de estar sobornándola para que coma (de allí que te empecé a seguir, por tu post sobre el percentil 3), que si otro bocado sino me llevo la casa de las muñecas, que si otro bocado o no podemos ir al parque, otro bocado para que te crezcan las piernas y así, No llora, se muestra entusiasta porque quiere ser grande o ir al parque o jugar con la casa de la muñecas, etc…
Come algo más pero es extenuante, parece caer en el punto 2, se que no está bien, pero no se cómo abordarlo.
Gracias,